Los médicos anuncian ya nuevas movilizaciones. La Plataforma de Facultativos de Galicia (constituida por los sindicatos O'Mega y CESM) está llevando a cabo asambleas informativas en todos los hospitales y centros de primaria para denunciar los últimos acuerdos que ha tomado la Administración sanitaria y que, según esta plataforma, se tomaron sin tener en cuenta al colectivo profesional.
Las protestas, incluida la huelga, comenzarán en la segunda quincena de febrero. Este paro se sumará al que desde hace más de tres meses (comenzó a mediados de octubre) siguen manteniendo los médicos que no cobran el plus de exclusividad, por compaginar su trabajo en la sanidad pública con la privada, y que ha provocado la cancelación de cientos de operaciones.
Para los representantes de los médicos, la insuficiencia de los facultativos en las plantillas del Sergas es una de las causas de la congestión de las urgencias que se vivió en las últimas semanas y del incremento de las listas de espera. Cándido Andión, presidente de CESM Galicia, señalaba ayer que «cuando un médico tose sus compañeros tiemblan», ya que ante cualquier baja, permiso o vacaciones los compañeros se ven desbordados al tener que asumir la asistencia de los pacientes de los facultativos que no están.
Esta situación se debe no solo a la escasez de médicos, sino que desde CESM culpan también a la política que está llevando a cabo la Consellería de Sanidade. Así, mientras admiten que el envejecimiento de la población es un factor a tener en cuenta (más del 30% de los gallegos), lo que incrementa la demanda (los mayores de 60 años van al médico cuatro o cinco veces más), «la inoperancia y desorganización de los gestores, amparada por los políticos», también agrava la situación de la sanidad.
El idioma
Los sindicatos se refieren a que los médicos gallegos trabajan en peores condiciones laborales y retributivas, por lo que no solo no se capta a profesionales de fuera, sino que se van los que están aquí. «Otras comunidades están logrando captar a los pocos médicos disponibles, ofreciéndoles estabilidad y mejores condiciones. Galicia, para colmo, si ya es difícil atraer médicos porque hay pocos disponibles, en la reciente convocatoria de la OPE (oferta pública de empleo) 2008, añade a los problemas señalados una dificultad más, la del idioma», lamenta Andión.
El acuerdo marco cerrado recientemente es uno de los puntos de fricción entre la plataforma de facultativos y el Sergas. El presidente de CESM en la comunidad gallega indica que «es posible que de no resolverse la situación de inmediato y con garantías suficientes, dentro de pocos días -advierte Andión- explote un conflicto en todos los sectores de facultativos de la sanidad pública de Galicia».