Galicia tiene ya casi 1.300 núcleos de población sin un solo habitante

GALICIA

Las provincias de Lugo y A Coruña concentran el 80% de esas aldeas, que acentúan el despoblamiento rural

08 jul 2008 . Actualizado a las 13:22 h.

La población gallega abandona el rural para asentarse en torno a los tres grandes ejes de comunicación de la comunidad: la autopista Ferrol-Vigo, la A-6 y la autovía de las Rías Baixas. Los últimos datos de población ponen de relieve un crecimiento concentrado en esos polos y un abandono de los pequeños núcleos de población, los lugares en los que se ha conformado históricamente Galicia y que técnicamente se denominan «entidades singulares». Esos puntos abandonados son ya 1.261, conforme a los últimos datos de población que acaba de presentar el Instituto Galego de Estatística (IGE), con fecha del 2007. Son un 15% más que a inicios de siglo. En el 2000 apenas superaban el millar.

El incremento se va acentuando año tras año. De hecho, entre el 2006 y el último ejercicio que tiene cerrado el IGE, al censo de lugares abandonados se les sumaron otros 78, un 6,5% en apenas 12 meses.

Esos lugares vacíos suponen el 4% del total de núcleos de población de la comunidad, que son algo más de 30.000 repartidos en 315 ayuntamientos. La dispersión geográfica sigue siendo una evidencia palmaria a la que no se ha puesto coto; es un fenómeno exclusivo de Galicia que provoca, además, problemas para poder llevar servicios básicos a todos esos lugares, tan apartados unos de otros. Agrupados, forman lo que comúnmente se denomina parroquia, recuerda el IGE. Conforme a ese último estudio de población, en Galicia hay 93,7 personas por cada kilómetro cuadrado. La diferencia con otras comunidades españolas es abismal: 689 en Madrid, 297 en el País Vasco. Solo es comparable al caso de Andalucía o La Rioja.

Esa despoblación es más acuciante en las provincias de A Coruña y Lugo, que absorben el 80% de todos esos lugares ya sin almas. Solo en la de Lugo, Estatística ha contabilizado 524 núcleos sin presencia vecinal, el 5,3% de todas las entidades singulares. Hasta seis municipios lucenses tienen una veintena de sitios, con cientos de casas sin habitante alguno.

En la provincia de A Coruña hay ejemplos de municipios con hasta 70 y 90 lugares vacíos. En este caso, el movimiento demográfico se ha acentuado porque una gran parte de la población se concentra en el eje ártabro A Coruña-Ferrol o en Santiago y su área metropolitana. Porcentualmente, esos diminutos pueblos vacíos suponen el 4,8% del total.

Curiosamente, Ourense, que lleva años presentando un preocupante balance demográfico a la baja, es la provincia que agrupa un menor número de lugares abandonados, 111 repartidos por una treintena de ayuntamientos, apenas un tercio de los 92 concellos.

En Pontevedra hay contabilizados otros 120 lugares vacíos, si bien esta provincia es la única en el que se incluye una ciudad, la capital, entre las que cuentan con un mayor número de núcleos sin vida. Sin embargo, es la zona que presenta una mejor ratio de entidades singulares abandonadas: apenas suponen un 2% del total.

Otros 1.700 con dos vecinos

El informe poblacional del IGE pone de manifiesto el aumento de núcleos abandonados en la comunidad y también los que apenas cuentan con uno o dos vecinos. De entre los primeros hay 700 lugares; de los que cuentan con tres empadronados, algo más de un millar. Es decir, hay otros 1.700 entornos de población en la comunidad en los que residen apenas una media de dos ciudadanos.

Con todo, no hay una equivalencia exacta de que si en un municipio hay más lugares abandonados, entonces se pierde población: puede darse el caso de una concentración en otros puntos del concello, más poblados.