Una formación transversal que incluye intercambio musical, gestual y hasta gastronómico

La Voz

FERROL

05 may 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Interpretar el Ella, Ella de Kate Ryan o mostrar al mundo cómo los españoles traducimos al internacional lenguaje de los gestos la expresión Tu es fou -«estás loco», en castellano- forman parte de un aprendizaje en el que los niños se sumergen con agrado. Ayuda a ello el empleo de juegos y al uso creativo de la tecnología. Como buscar la palabra más larga. De momento gana por goleada una alemana de 111 letras, frente a la que poco tiene que hacer nuestro humilde esternocleidomastoideo. Ordenadores, cámaras de fotos, grabadoras e Internet complementan el clásico papel y lápiz con el que los niños copian palabras en francés y las traducen también a español y gallego. Sus compañeros europeos también toman nota. No en vano, entre los objetivos del programa Primalingua se encuentra el establecer contacto con lenguas minoritarias que se hablan en Europa.

Pero si hay alguna experiencia que se ha quedado grabada en la mente de los alumnos eumeses fue el intercambio gastronómico realizado por Navidad. Las tabletas de turrón y los mazapanes enviados desde aquí fueron correspondidas con, según recordó una de las alumnas, Inés Mateo, galletas procedentes de Ámsterdam, hojaldre holandés, pastas típicas de la época y cereales chocolateados llegados de otros puntos, pero, sobre todo, unos sugus rumanos que fueron racionados convenientemente por el profesor y que saborearon los alumnos hasta hace unas semanas.

Un gran mapa de Europa cubre parte de la pared del aula de francés. Allí han ido clavando los lugares que, gracias a Primalingua son ya sus compañeros de viaje.