Crece la lista de implicados del entorno de Alejandro Agag

Melchor Saiz Pardo

ESPAÑA

11 feb 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

El nombre de Jacobo Gordon Levenfelt aparece desde ayer en dos listas: en la de imputados en la trama de corrupción que salpica al PP y en la de amigos íntimos de Alejandro Agag, yerno del ex presidente del Gobierno José María Aznar, relacionados con ese entramado de favores y negocios turbios. El juez Baltasar Garzón lo interrogará, imputado por delitos como blanqueo de capitales, fraude fiscal y cohecho.

Cuatro de los asistentes a la boda de Ana Aznar y Alejando Agag, el 5 de septiembre del 2002, están imputados, entre ellos los empresarios Francisco Correa Sánchez y Álvaro Pérez Alonso, considerados dos de los principales responsables del entramado delictivo.

Gordon Levenfelt es amigo de la infancia y socio de Agag. En 1993, ambos formaron la empresa Natko S.?L. junto a otros amigos de la universidad con el objetivo de traer a España un juego entonces de moda entre los ejecutivos norteamericanos, el Gotcha, una guerra de armas ficticias que disparan bolitas de pintura. Según el registro, el presidente de Natko es Agag, y Gordon, uno de los consejeros delegados.

Aquella empresa no funcionó porque Natko nunca consiguió los permisos, pero a día de hoy sigue tan viva como la relación entre Agag y Gordon. Hasta el punto de que Agag lo colocó en el segundo lugar de su lista de 25 testigos de boda. En ese exclusivo elenco también estuvo Correa Sánchez. Tras su arresto el pasado viernes, Agag se apresuró a desmentir que tuviera una relación de amistad y aseguró haber perdido el contacto con él hace años.

Otro de los invitados fue Pérez Alonso, que en las imágenes del enlace aparece con un enorme puro apagado a las puertas del monasterio. Presidente de Orange Market, fue detenido el lunes en Valencia por los agentes anticorrupción. A la boda en El Escorial también fue Carmen Rodríguez Quijano, del brazo de su marido, Francisco Correa, y junto a él imputada hoy de cohecho, tráfico de influencias, fraude fiscal y blanqueo de capitales.

Los especialistas de la Unidad contra la Delincuencia Económica no descartan que otros invitados a la boda pasen a engrosar en breve los listados que maneja Garzón.