Caixanova cubre con dificultad sus gastos con el negocio financiero

ECONOMÍA

02 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El negocio exclusivamente financiero (tomar y prestar dinero) apenas le llega a Caixanova para cubrir sus gastos de funcionamiento. Absorben más del 78% de su negocio corriente, según la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA) y un informe interno de Comisiones Obreras, el primer sindicato bancario de España. Es una de las tres cajas menos eficientes en negocio exclusivamente bancario, lo que no ha pasado desapercibido en las negociaciones entre Caixa Galicia y Caixanova, provocando momentos de tensión por parte de la segunda, según fuentes cercanas al proceso.? La explicación a esa dificultad está en R. Su venta se ha revelado como necesaria para Caixanova, porque le inyecta dinero en un momento delicado, y porque los números de la empresa de cable empeoran las cuentas del grupo Caixanova y lo debilitan ante una negociación para la fusión. La venta podía resultar una operación estratégica y se cerró con tal celeridad que los pequeños inversores de R llegaron casi forzados a ella, cuando estaba casi cerrada.

Normas contables

Por norma contable, los gastos de R se incluyen en la cuenta de Caixanova, pero sus beneficios no computan como negocio financiero. Una empresa de telecomunicaciones no entra en esa categoría, como sí un banco participado (el Gallego para Caixanova o el Etcheverría para Caixa Galicia) o una firma de seguros. R penaliza las cuentas ordinarias, aunque al final permite mejorar las cuentas. Por eso, los resultados exclusivamente bancarios de la entidad presidida por Julio Fernández Gayoso fueron negativos en el 2009, como constata la CECA. En total, 29,5 millones de pérdidas, aunque presentó más de 100 de beneficio por el resto de operaciones.?Caixa Galicia, en este punto, ganaba 312 millones, pero su resultado fue menor (91 millones). Se trata en ambos casos de restar los gastos al negocio financiero.? Si se elimina el efecto R, las cuentas de Caixanova son positivas, pero los gastos absorben el 78% de los ingresos en las sucursales. Son 18 puntos peor que la media de España. Está a la cola en eficiencia financiera.

Esos problemas los constata CC.?OO. en un informe que revela que esta caja tiene pérdidas en su negocio ordinario «antes ya de aplicar deterioros de activos financieros». Aplicándolos, son 10,7 millones de pérdidas. «¿Puede una caja con esas dificultades tutelar la segunda mayor fusión de cajas en España?», plantean fuentes financieras.

Caixa Galicia gana 325 millones por ese concepto. La situación de Caixanova es, en este punto, igual que CajaSur, Caja Guadalajara o Caja Castilla-La Mancha, todas en procesos de fusión. Caixanova presentó esta semana sus resultados trimestrales: 18,9 millones de beneficio, un 33% menos que en el 2009. Son datos individuales de la caja, sin contabilizar el grupo. Es una práctica común en esta entidad, pero no en el resto del sector. Las ratios de morosidad, solvencia y eficiencia empeoran cuando la caja hace públicos los datos del grupo, aunque, a la vez, le permite mejorar los resultados finales. Es decir, cuenta con mayor beneficio neto por su cartera industrial. ?

Más contactos

Los negociadores de Caixa Galicia y de Caixanova volverán a mantener contactos mañana y pasado para intentar alcanzar un acuerdo definitivo sobre el protocolo de fusión. Mientras, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, intenta cerrar para el martes una reunión con los líderes del PSdeG y del BNG, Pachi Vázquez y Guillerme Vázquez. Esos movimientos precederán al encuentro del miércoles organizado por Feijoo con un representante del Banco de España, posiblemente Jerónimo Martínez Tello, y los máximos responsables de las cajas, José Luis Méndez y Fernández Gayoso.

«La reunión del miércoles será clave», coincidían fuentes financieras y políticas, que explican que Feijoo intentará alcanzar una fusión, certificada como sólida y solvente por el supervisor, y que está enrocada por las exigencias personales de Gayoso.? La situación de Gayoso es cada día más difícil, pues sus demandas son consideradas como inasumibles por relevantes sectores sociales, políticos y sindicales. Esta semana, los tres sindicatos pidieron su «jubilación».?