El lobo ataca a pocos metros de las casas de Rodeiro y mata 3 ovejas y un carnero en una finca bien vallada
RODEIRO
El lobo se especializa en Rodeiro en sus ataques a las ganaderías ovinas. Si hace unos meses había invadido una finca en Río, donde la explicación para justificar como había podido franquear más de dos metros eran posibles apoyos en pacas de hierba, ayer entró en una parcela lindante con las casas de Rodeiro (en la parte de atrás de Casa Sánchez) también con mas de diez metros y sin que se conozca ningún apoyo, solo que de algún modo trepe por la alambrada.
La finca propiedad de Javier Hermida está totalmente vallada. El lobo sacrificó cuatro reses, tres ovejas preñadas y un carnero con calidad, que más allá incluso de su valor tiene costes como seguros para el traslado obligado de los cadáveres y todo el trabajo y el valor de las crías que ya se pierde.
El propietario ya tuvo dificultades para poder denunciar en Medio Rural el ataque porque en ámbitos locales oficiales se le facilitó un número antiguo. Finalmente un agente forestal le facilito el actualizado y ayer pudo contactar. «A resposta foi inmediata. En pouco máis de dúas horas personáronse na finca para comprobar a denuncia».
El ataque había sido la noche del sábado y se reitero la del domingo al lunes. En el primer ataque mato a los animales y en el segundo dejó solo parte, en casos comidos y en casos arrastrados fuera, algo que todavía intriga más a todos porque a la dificultad de salvar los más de dos metros se suma que el lobo llevase parte del cordero. «Noutra finca podería entender que entren, nesta non o esperaba, parece imposible», dice Hermida quién, como muchos, entiende que los lobos ahora no tienen comida en el monte y reclama que se les de para evitar que sigan bajando hasta el pueblo.