La Fiscalía investiga anualmente sesenta denuncias urbanísticas en la provincia de Pontevedra

L. Penide / A. Castroverde

DEZA

09 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Los delitos urbanísticos están de moda en la provincia. Así lo vino a asegurar ayer el fiscal jefe de Pontevedra, Juan Carlos Aladro, en el transcurso de las quintas Xornadas de Urbanismo que organiza la Diputación. Anualmente, por término medio, el ministerio público investiga unas sesenta denuncias en la provincia. En cualquier caso, el ritmo de las investigaciones judiciales no parece haber contentado a todo el mundo. El concejal César Mosquera reveló en el mismo foro que el Concello de Pontevedra remitió 100 infracciones a la Fiscalía y todavía no se sentenció ninguna.

Los espacios con mayor riesgo de ser escenario de estos delitos es el litoral. Subrayó que el motivo no es otro que el hecho de que «la gente quiere acercarse al mar», aunque eso, en ocasiones, implique la invasión del dominio público.

De este modo, los casos más habituales se circunscriben a construcciones en suelos con una determinada protección, urbanizaciones y la modificación de planes de ordenación. Se trata de cuestiones complejas y de difícil instrucción, en las que se puede a llegar a decretar demoliciones o derribos.

En cuanto a la figuras que se encuadran dentro de los delitos urbanísticos, una de las principales es la prevaricación. Aladro reseñó que tiene que ser un acto doloso, si bien matizó que, siendo posible el error, en urbanismo es «bastante inconcebible» que se produzca. En sintonía con esta cuestión, Aladro también mantuvo la tesis de que es complicado que se pueda hablar de un delito en grado de tentativa. «El hecho de clavar una punta o de colocar una piedra ya es consumación», resaltó, aunque se hizo eco de una sentencia de la Audiencia de A Coruña en la que se condena por tentativa ya que existió un acopio de material.

Indignados

Las palabras del fiscal sobre el delito urbanístico y la escasa posibilidad de error no sentaron nada bien a algunos técnicos municipales que ocuparon la misma tribuna solo hora y media después. Aludieron a la proliferación de leyes.