Las instalaciones municipales, que también se inundaron, estarán cerradas al menos esta semana
28 dic 2009 . Actualizado a las 11:50 h.Un pequeño incendio en un cuadro eléctrico de la piscina municipal de Sada acabó ocasionando ayer por la tarde graves daños en todo el recinto deportivo. Los bomberos de Betanzos, que acudieron a sofocar las llamas, explicaron que en un primer momento se pensó que el fuego solo había afectado al mostrador de la entrada de las instalaciones y a un falso techo en esa misma zona, pero poco después los bomberos comprobaron que también estaban dañados los vestuarios, otras dependencias y el gimnasio, que se inundó debido a la rotura de una tubería del agua.
La llamada de alerta se recibió en el parque comarcal de Betanzos sobre las cinco de la tarde, aunque según explicaron sus responsables el incendio, con toda seguridad, había comenzado mucho antes. Cuando llegaron los bomberos a las instalaciones deportivas las llamas se había extinguido y en una primera inspección se comprobó que se habían originado en un cuadro eléctrico situado a la entrada de las instalaciones y que el fuego había calcinado un mostrador y un falso techo. Tras una inspección más exhaustiva, los bomberos comprobaron que el humo y el calor generado por el incendio se extendió por todo el recinto a través de los conductos de la ventilación, llegando a la parte trasera del edificio donde están situados los vestuarios. Debido a las altas temperaturas, se fundieron numerosas canalizaciones de la luz y parte del mobiliario. También el denso humo oscuro llegó hasta la zona de la piscina que, según explicaron los bomberos, estaba «completamente manchada de negro», incluso el agua.
Además, las altas temperaturas ocasionadas por el incendio provocaron la rotura de una conducción del agua elaborada con polipropileno, lo que causó la inundación de la sala de la planta baja donde está situado el gimnasio. Según los bomberos, el nivel del agua llegaba a los 20 centímetros de altura, por lo que fue necesario utilizar tres bombas de achique.
Responsables del Servicio de Emergencias Municipal, que ayudó en las labores de extinción y achique, indicaron que la afectación a nivel de apertura del centro fue «del cien por ciento», por lo que las instalaciones deberán estar cerradas al menos durante esta semana.
Por otro lado, los bomberos de A Coruña acudieron ayer por la tarde, sobre las 14.30 horas, al décimo piso de un edificio que hace esquina entre la avenida de Finisterre y la ronda de Outeiro, para apagar el fuego que se había declarado en un calefactor situado en el salón y que había afectado a un sofá. Cuando los bomberos llegaron, los vecinos ya habían conseguido sofocar las llamas y solo fue necesario ventilar.