Expocoruña ha sido este fin de semana (y aún es: hoy continúa la feria durante toda la jornada) un ramillete de estands de ropa con forma de margarita. En cada pétalo, un diseñador exponía su mercancía para darla a conocer, pero también, en algunos casos, para su venta. Sucedía, por ejemplo, en el puesto de Petunia.
Procedentes de Vigo, ofrecían las creaciones en textil de su firma, que también diseña muebles. Se trata de una colección de camisetas, blusas y sudaderas con un hilo conductor harto curioso: «Es una niña a la que se le rompe una muñeca. Su personaje va evolucionando de prenda a prenda», explica Alberto Neves. O sea, ¿podríamos decir que cada camiseta es la viñeta de un cómic?. «Sí, algo así», contesta. Una clienta que escucha la conversación pronto dice un «!ah!» completamente revelador.
Mientras Alberto y su socio despachaban camisetas, Lidia Damunt ofrecía un concierto para unas cuarenta personas. Su folk de raíz americana, emocionante y sudoroso, gustó. Casi tanto como gustaron los suecos Lo-Fi-Fnk al mediodía. Apenas los vieron cien, pero 95 bailaron como posesos con su electropop. «Y los cinco que no lo hicieron es por que eran tímidos», comentaba en broma un joven en el pequeño auditorio montado en la zona de estands.
En la otra zona, el hall de entrada, Ana Fernández-Villaverde, es decir La Bien Querida, y su banda probaban sonido a la misma hora. Y sí, lo hacía con sus características faldas rematadas en volantes de inspiración regional que tanto impacto han causado desde que salió su disco. Se ve que la imagen no va solo cuando hay que actuar.
Pero para impactos, solo había que seguir caminando por la feria. Desde las ropitas para muñecas de la firma Cangaway de la coruñesa Blanca González a los modelos de Dikisi. «Nos inspiramos en los años cuarenta, en las playas francesas y usamos esos colores muy afrancesados», explicaba.
Al caer la tarde retornó la música. Primero, con unos Extraperlo que se reafirmaron como una de las promesas del indie ibérico. Luego, con La Bien Querida ofreciendo un directo en el que hubo división de opiniones. Y al final, The Wave Pictures, prolongando su idilio con esa chispa que lo ha convertido en un grupo tremendamente especial. Al cierre de esta edición, The Rakes tenían previsto subir al escenario.