Tres barrios debaten su marcha de la federación vecinal

A CORUÑA CIUDAD

26 mar 2008 . Actualizado a las 11:53 h.

Dos años más tarde de que las elecciones a la presidencia de la Federación de Asociacións de A Coruña e Área Metropolitana supusieran la escenificación de distintas «sensibilidades» en el colectivo vecinal, la renovación en estos momentos de la directiva vuelve a constatar que estas fricciones no se superaron. Las asociaciones vecinales de Agra, Monte Alto y Oza-Gaiteira-Os Castros anunciaron ayer que no participarán en la elección y que abren un período de debate interno que podría derivar en una escisión.

El anuncio coincidió ayer con el cierre del plazo de presentación de candidaturas, que se cerró con una única propuesta, la encabezada por Luisa Varela, una iniciativa continuista con la actual directiva encabezada por José Antonio Folgueira.

David Pena, presidente del colectivo de Monte Alto y portavoz del grupo crítico con la federación, explicó que toman esta postura porque entienden que no se han cumplido, en el proceso electoral, «uns mínimos democráticos nin un pluralismo interno». Puntualizó que la propuesta de Luisa Varela no representa al colectivo e indica que se les ha ofrecido incluir, en una lista de 17 personas, a uno de sus miembros. «Nós asumimos que representamos o 30% do movemento veciñal, non podemos asumir un 1%», explicó.

Aseguró que no respaldarán esa candidatura y también descartó que propongan ninguna nueva, ni que impugnen el proceso. «Non asistiremos a esa mascarada», apostilló. «Consideramos que asistir á asemblea do venres sería lexitimar unha operación con vicios democráticos desde o momento cero», indicó y estimó que lo que subyace en esta crisis es «unha concepción distinta do movemento veciñal». En este sentido, cuestionó que las iniciativas que se realicen desde la federación sean cursos de formación, «como o de encaixe de bolillos, que son para os centros cívicos», y no propuestas de participación ciudadana.

Pena indicó que aunque numéricamente estén en clara desventaja, representan el colectivo con mayor peso social y más reivindicativo en cuestiones como el problema del carbón en los Castros, el viaducto de la ronda de Nelle o el problema del urbanismo en Monte Alto. Informó de que en estos momentos se plantean un momento de reflexión en el que analizarán, entre otras cuestiones, una posible escisión. Destacó que en ningún caso pasaría por su integración en la Federación Salvador de Madariaga, debido a su carácter «localista» y no metropolitano, pero sí destacó que existen otros colectivos, como O Noso Burgo en Culleredo, que se sitúan en su misma órbita.

«Romper a baralla»

Folgueira, por su parte, comentó ayer tarde que desconocía que alguien se descolgase de la convocatoria. «Non sei o que eles entenden por democracia», comentó, y defendió el derecho de Luisa Varela de formar una candidatura «con xente da súa confianza». «Resulta penoso, que alguén por non ter respaldo rompa a baralla e nos tilde de non ser demócratas», estimó, y recordó que ha trabajado con el sector crítico los últimos nueve años sin problemas, aunque reconoció que los críticos «cando perderon as eleccións non volveron a pasar pola federación».

«Rebentar e armar algaradas é o máis doado. O difícil é gañar eleccións», consideró.