Hace unos días, Manuel Domínguez, vecino de Cabo de Cruz, se llevó una sorpresa al acudir al hospital comarcal para interesarse por la situación de las citas que su esposa, Ramona Lojo, había solicitado para tres servicios distintos y comprobar que su esposa no figuraba en ninguna lista de espera.
La noticia sentó como un jarro de agua fría a Manuel y a su esposa, que presentaron, no una, sino dos quejas por escrito en el centro hospitalario de Oleiros. En ellas, además de denunciar el caso, este vecino arremete contra la directora del hospital por aparecer en los medios de comunicación pregonando la reducción de las listas de espera.
Según el relato de Domínguez, el médico de cabecera había dado los volantes correspondientes a su esposa para que solicitase una consulta con distintos especialistas en el hospital comarcal. Como le indicó su médico, Ramona Lojo pidió cita en el centro los días 8 de julio, 25 de agosto y 27 de octubre del 2008 para distintos servicios.
En teoría, tras pedir vez, la mujer debería haber entrado en la lista de espera de cada uno de esos servicios. Sin embargo, ante la tardanza en llamar a la paciente para acudir al especialista, Manuel se personó el día 9 en el hospital para ver qué ocurría. Fue entonces cuando en la recepción le indicaron que el nombre de su esposa no aparecía en ninguna lista.
Este hecho indignó al hombre, que considera una «falta de respecto aos enfermos e ás persoas» la actitud de la directora del hospital, Rosario Vázquez: «A obriga da directora é mirar polos pacientes, non andar a falar do que fixo o PP nin de nada diso». Considera además un «atrevemento» que Vázquez «siga saíndo nos medios de comunicación presumindo da redución das listas de espera», una afirmación que aparece recogida en los escritos de queja que presentó en el hospital.
Asegura que le aconsejaron que llamara al diputado popular Manuel Ruiz para que se hiciera eco de su caso, pero prefirió no hacerlo: «Non quero nada de política, se son o que me queixo, son eu o que teño que protestar».
En contra de esto, Rosario Vázquez está convencida de que esta denuncia responde a «una estratagema política, porque al PP le molesta profundamente que el hospital haya avanzado tanto en estos tres años». No obstante, indicó que el lunes, en cuanto llegue al hospital, comprobará qué ocurrió con las citas de Ramona Lojo y emplazó a los afectados a acudir al centro para aclarar la situación.