Aja dice que las sentencias judiciales no son «infalibles» y culpa a Roel de que pisos de O Valado aún sean ilegales

La Voz

A MARIÑA

18 abr 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

En defensa del alcalde viveirense Melchor Roel, la ejecutiva provincial del PSOE detecta «intereses escursos, tanto por parte do anterior goberno de Viveiro, como por parte do promotor» de los edificios de O Valado y Lodeiro sobre los que pesan sentencias firmes de derribo tras declararse ilegales las licencias. César Aja, presidente del PP de Viveiro y regidor cuando se permitieron esas construcciones, cree que la anulación judicial de una licencia «no presupone que quien o quienes la hayan otorgado hayan incurrido en ninguna arbitrariedad o ilegalidad, siempre y cuando los informes municipales y los de la Xunta sean favorables, como este caso».

Dirigiéndose a los socialistas, Aja asegura que «saben sobradamente, sino ya lo habrían denunciado, que cuando el PP gobernaba en Viveiro, nunca en ningún momento se otorgó una sola licencia con informes dudosos o desfavorables, lo que no está ocurriendo con los equipos presididos por ellos».

«Las decisiones de un tribunal en ningún caso son dogmas de fe ni infalibles, aunque sí acatables, y pruebas de ello las encontramos a diario, magistrados y jueces del más alto nivel divergen sobre las distintas cuestiones (...). Por tanto no criminalicemos ni mancillemos a quienes sí habrían incurrido en ilegalidad si no hubiesen otorgado una licencia con informes favorables», añade César Aja.

Centrándose en la orden judicial de derribo de once pisos en O Valado, Aja dice que Roel, «después de siete años de alcalde, no solo no ha arreglado un problema, ya resuelto, sino que lo ha complicado de tal forma y manera que incluso se ha vuelto contra él». Citando juristas a quienes consultaron los afectados, asegura que «han puesto en evidencia al mandatario local, que no quiere adoptar la solución administrativa que desde el PP se le apuntó, y que pasaría por aplicar a este edificio el mismo criterio que al número 42 de la misma calle».