Rusia realizará maniobras con armas nucleares en respuesta a las «amenazas» occidentales

Rafael Mañueco MOSCÚ / COLPISA

INTERNACIONAL

Vladimir Putin, el jueves durante una reunión en Moscú.
Vladimir Putin, el jueves durante una reunión en Moscú. Mikhail Metzel | REUTERS

La orden para «comprobar la preparación de este armamento sobre el terreno» ha sido dada por el propio Vladimir Putin

06 may 2024 . Actualizado a las 16:01 h.

 El presidente ruso, Vladimir Putin, ha ordenado a sus fuerzas armadas que organicen «en un futuro próximo» maniobras de cara a un ataque nuclear táctico contra Ucrania ante las constantes «amenazas» de Occidente a Moscú. Así lo ha anunciado este lunes el Ministerio de Defensa, subrayando que se trata de «aumentar la preparación de las fuerzas nucleares no estratégicas para llevar a cabo misiones de combate».

El comunicado castrense señala que la orden de realizar estos ejercicios ha sido dada directamente por Putin ante «las amenazas y declaraciones provocativas de ciertos altos funcionarios occidentales». Se especifica también que el Estado Mayor ha comenzado ya a preparar las maniobras «con las grandes unidades de misiles de la Región Militar Sur -fronteriza con Ucrania- y con la participación de la aviación y de la Marina».

 La nota insiste en que con las maniobras se pretende «poner en práctica un conjunto de actividades para comprobar la preparación sobre el terreno en el uso de armas nucleares no estratégicas (…) para garantizar incondicionalmente la integridad territorial y la soberanía del Estado ruso en respuesta a declaraciones provocativas y amenazas de funcionarios occidentales individuales». No concreta a qué personas ni a qué declaraciones se refiere, pero lo que parece haber causado la indignación de Putin han sido las palabras del presidente francés, Emmanuel Macron, y del jefe de la diplomacia británica, David Cameron, sobre la posibilidad de enviar tropas de sus respectivos países en apoyo de Ucrania.

Un arsenal enorme

Las armas nucleares no estratégicas, también llamadas tácticas, son armamento atómico, cuyos vectores son misiles de alcance relativamente corto, es decir, no son como los cohetes intercontinentales estratégicos. Tienen una potencia destructiva mucho más baja, pero son capaces de asolar amplios territorios y centros de población.

Los cohetes Iskander, por ejemplo, son algunos de los muchos armamentos rusos que pueden portar cabezas atómicas tácticas y están ya desplegados con sus ojivas en Bielorrusia. Se calcula que Rusia cuenta con el mayor arsenal del mundo de este tipo de armas, que nunca han sido utilizadas en ningún conflicto. Las bombas de Hiroshima y Nagasaki tenían carácter estratégico.

Desde el comienzo de la invasión de Ucrania, las autoridades rusas -no solamente el presidente del país sino ministros, diplomáticos y altos funcionarios como el expresidente Dmitri Medvédev- han amenazado con la posibilidad del empleo de armas nucleares en Ucrania o contra países de la OTAN, en caso de que Rusia vea amenazada «su soberanía, integridad territorial o existencia como Estado».

La nueva doctrina militar de Moscú permite recurrir primero a las armas nucleares en tales casos sin necesidad de que un agresor las haya empleado antes y a las zonas anexionadas de Ucrania en Moscú se las considera partes integrantes de la Federación Rusa. De ahí que, con anterioridad, distintos líderes occidentales hayan calificado repetidamente de «irresponsables» las amenazas de usar este tipo de armamento.